Callarte a besos porque no hay otra forma posible de hacerlo, y entre beso y beso, esa mirada que te caracteriza. No hay forma posible de no tener ganas de verte. Y si no es verte es hablar contigo, entre mirada y mirada, entre caricias y silencios nos decimos todo.
Yo ya no prometo nada, y mucho menos quiero que lo hagas tú. Porque me vale con tu presencia en mi presente, con tu mano acariciando mi mejilla, con tu sonrisa traviesa y esos estúpidos apodos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario